¿Quién es Darío García y cómo ha sido este camino de liderar la cartera de Economía en la región de O’Higgins?
“Soy santiaguino de nacimiento, rancagüino de corazón, porteño de ley. Llegué a los 5 años a vivir a Rancagua; vivo en la casa de mi abuela, donde crecí, que está en el barrio Estación, ahí en calle Maruri. Estudié en el Óscar Castro Zúñiga. Me titulé de ingeniero comercial en la Católica de Valparaíso, y Valparaíso sensibilizó mi lado más artístico, cultural y patrimonial por la vocación que tiene la ciudad. De ahí comenzó un camino ligado a la industria creativa, el turismo esencialmente. Tuve una empresa de turismo muchos años, que se llamaba El Lado B, que se dedicaba a mostrar los lados no tan turísticos de Valparaíso.
En el camino conocí a unos amigos de una ONG, Valparaíso en Colores, que gestionaban murales, y así creamos este modelo de recuperación de espacios públicos a través del pintado de murales para luego visualizarlos a través de rutas patrimoniales. Estuve mucho tiempo dedicado a eso como emprendedor y, bueno, siempre con una sensibilidad por los temas públicos y políticos. Mi abuelo fue dirigente sindical en Sewell, un connotado personaje de esa época, militante del Partido Socialista, don Daniel García.
Fui parte del movimiento estudiantil en 2011, y ahí tuve la oportunidad de conocer al Presidente. En el año 2019 entré al municipio de Valparaíso y, en el año 2021, volví a la región para trabajar en Sernatur O’Higgins, con residencia en Pichilemu. Eso fue bastante especial porque implica nuestro principal destino turístico y, a la vez, es un lugar que está en un auge muy importante, pero que tiene que ir de la mano con la gente que habita en los lugares, para que no sea un turismo invasivo. Así que me permitió conocer esa realidad de Cardenal Caro, una provincia postergada, de una región postergada, creo yo, dentro de la macrozona centro.
Después de tres años trabajando en Sernatur O’Higgins como encargado de marketing, el gobernador Pablo Silva me invita a ser parte de su equipo en el área de turismo. Luego, tras una reestructuración a nivel regional, el delegado me comunica que asumiría como Seremi de Economía el 1 de abril del presente año. Y eso han sido casi 8 meses ya. Ha sido súper intenso, pero a la vez súper desafiante. Creo que me preparé durante todo este tiempo para el rol que estoy cumpliendo hoy en día, y eso se agradece desde lo humano, principalmente.”
¿Cuáles son los principales desafíos y proyectos del gobierno central y del trabajo en los diversos territorios de la región de O’Higgins?
“Aquí hay tres perspectivas. La primera, que es desde el gobierno, obviamente. El mandato del Presidente Gabriel Boric es que este es el año del crecimiento, y ese es mi principal desafío. En eso trabajo todos los días, de una u otra manera. Estoy preocupado de que se destrabe la inversión pública y privada a través del gabinete pro crecimiento y empleo, que es un mandato presidencial. Este gabinete sesionó aquí el 26 de abril, cuando yo estaba recién asumiendo, y su objetivo es destrabar la inversión pública y privada a través de gestiones que yo pueda hacer como Seremi, junto a mis colegas del MOP, del Serviu, del SAG, de CONAF y siempre al alero del delegado presidencial, don Fabio López, quien me ha respaldado mucho en este trabajo. Esto se da en un contexto en el que, el año pasado, fuimos una de las regiones que decreció en su PIB regional. Sin embargo, este año, ya en el primer trimestre, tuvimos un crecimiento de alrededor de un 1,4%, ligado al desempeño minero. Así que mi principal desafío es que, en abril de 2025, estemos hablando de crecimiento sostenido.
Desde la perspectiva regional, ese crecimiento tiene que ir de la mano con las políticas medioambientales que hemos impulsado desde el gobierno del Presidente Gabriel Boric. Por eso, trabajo mucho de la mano con la Seremi de Medio Ambiente, y dentro de la Seremi está la Agencia de Sustentabilidad y Cambio Climático. Estamos al alero de todo ese trabajo orientado hacia un desarrollo económico sostenible.
Y, por último, una de las perspectivas que más me interesa y por la cual tengo mayor vocación: el turismo. Poder dar énfasis a ese buen momento que estamos viviendo como región a través del turismo, pero propiciando un desarrollo descentralizado de las capitales regionales. Fui testigo de lo que pasa en Cardenal Caro y en Colchagua. Ahí te cuento dos hitos que han sido históricos: el gabinete económico regional, compuesto por CORFO, SERCOTEC, SERNATUR, el INE, y SERNAC, sesionó por primera vez en la provincia de Cardenal Caro, con la delegada provincial Josefina Toro. Eso nunca había ocurrido. Allí tuvimos un diálogo con cooperativas. También se sesionó en Colchagua. Ambos gestos representan la descentralización, que quiero manifestar como un sello distintivo dentro de mi gestión.”
Usted actualmente es Seremi de Economía, Fomento y Turismo, pero informalmente suma ‘y de creatividad’. ¿Por qué? ¿Qué lugar ocupa el ámbito de las artes y las culturas en su gestión?
“Soy un apasionado de la creatividad. Creo que el ser humano es intrínsecamente creativo y por eso le pongo especial énfasis al trabajo que puedo realizar, en este caso, de la mano con el Seremi de Cultura, don Cristo Cucumides, con quien hemos levantado una mesa de economías creativas. Además, haberme formado en Valparaíso me da esa sensibilidad por el sector artístico y cultural. Soy una persona que consume cultura semanalmente, y creo que eso debe ocurrir en toda la región. El arte y la cultura son expresiones del alma necesarias y debemos velar por la democratización del acceso a ellas.
A la vez, desde la perspectiva del artista, tengo muy claro que es un sector sumamente precarizado, pese a todos los esfuerzos del Ministerio de las Culturas. Por eso, le doy un interés especial. Mi experiencia como ingeniero comercial me ha llevado a trabajar para fomentar la formalización de los emprendimientos culturales, convirtiendo los talentos en emprendimientos creativos que les permitan sustentarse en el tiempo, a partir de un modelo de desarrollo con perspectiva económica. Ese es uno de los desafíos que tengo hoy en día como Seremi de Economía, Fomento y Creatividad.“
Se da cuenta a la comunidad de una gestión en constante colaboración con otras unidades y secretarías, como el Servicio del Patrimonio. ¿Cuáles serían los principales ejes de trabajo? ¿Considera relevante el trabajo mancomunado entre servicios y/o seremis?
“Lo considero fundamental. Soy una persona que tiene una mirada muy estadista de las cosas y, cómo decirlo, holística. Entonces, creo especialmente en el trabajo colaborativo desde el gobierno central, regional, comunal —que son los municipios— y la academia. Más aún ahora que tenemos a la Universidad de O’Higgins como estandarte de la educación superior, además de lo que ya hacían Inacap y Santo Tomás. Estoy siempre tratando de encontrar espacios de colaboración con quien esté dispuesto a trabajar en conjunto.
Creo mucho en esto desde el punto de vista del desarrollo humano. Siempre parafraseo a Humberto Maturana, quien decía que el ser humano está biológicamente hecho para evolucionar de manera cooperativa y no competitiva. Esto es especialmente relevante en un tiempo donde es difícil confiar. Por eso, hay también un desafío en recuperar esa confianza, para que la gente vuelva a reencontrarse con la idea de que somos un Estado que está a disposición, en mi caso, de los emprendedores, para fomentar su desarrollo sostenible.”
Este año, en nuestra región, ha sido especialmente importante para el ámbito de los patrimonios alimentarios y el turismo gastronómico, sobre todo en proyectos llevados a cabo por gestores de la región y privados con apoyo estatal, como la Ruta de los Abastos. ¿Cuál es el valor que le otorga a nuestro patrimonio inmaterial para el desarrollo regional?
“Es esencial. Somos una región eminentemente patrimonial y ese patrimonio se vislumbra en todas sus manifestaciones, no solo en lo material. Hoy en día, la puesta en valor que ha hecho la Ruta de los Abastos, como proyecto emblemático con todo el reconocimiento internacional que ha tenido y el apoyo de FIA, demuestra lo que la gente quiere conocer: ese patrimonio inmaterial que, en este caso, está vinculado a la gastronomía, con la mesa como el lugar que reúne, un gesto esencial para el ser humano.
Pero si hoy le damos ese sello de turismo gastronómico rural, lo valoramos aún más. Agradezco mucho al equipo que está detrás, a Consuelo Poblete, a Ítalo en su momento, porque finalmente las cosas suceden cuando alguien insiste demasiado con un tema. Y mira lo que han logrado. Yo, en su momento como encargado de marketing, pude apoyar la difusión de este proyecto como parte de la línea de promoción, y debemos seguir apoyando iniciativas como esta.
Estos proyectos se desarrollan bajo un modelo de encadenamiento regional de servicios turísticos para elaborar productos turísticos con una mirada desde el territorio: sostenible, inclusiva y, además, con rostro de mujer. Siempre he considerado relevante destacar el rol de la mujer en el desarrollo turístico y económico.
Mi experiencia en Sernatur me llevó a entender que el turista busca vivenciar experiencias reales, y como región tenemos muchas ventajas y atributos que aprovechar. Si bien Agricultura fue visionaria y puso el apoyo inicial, tenemos que darle continuidad a ese modelo económico y ver cómo estos proyectos pueden escalar y consolidarse.”
¿A través de qué programas se apoya a los diversos gestores y emprendedores turísticos y creativos de la región?
“Principalmente a través de CORFO y SERCOTEC, como instrumentos de financiamiento. La invitación es a que la gente esté constantemente revisando estas páginas para estar al tanto de cuándo abren las convocatorias, cuáles son las fechas de postulación y los procesos, además de leer muy bien las bases. Pero lo primero es que los emprendedores se acerquen a los Centros de Desarrollo de Negocios.
Y, si bien no es de este ministerio, también está FOSIS, que ofrece montos menores pero que sin duda impactan de manera muy positiva el impulso emprendedor. Además, con cada postulación, independientemente de los resultados, se aprende y permite repensar nuestro modelo de negocios.
Por otro lado, junto con el Seremi de Cultura, hemos conformado una mesa de industria creativa que hoy en día está abocada principalmente a analizar el estado del arte en relación con lo que se está haciendo. A esta mesa pertenecen la Universidad de O’Higgins, el Servicio de Patrimonio, la Fundación Sewell, entre otros. Ya estamos abriendo este espacio al sector privado, pero siempre desde la mirada de los gremios, como una forma de trabajar por el bien común y no por proyectos individuales.”
¿Cuál es la impronta y el legado que usted quiere dejar para nuestra región?
“Primero, como Seremi de Economía, quiero que se perciba ese trabajo mancomunado y cooperativo desde las distintas carteras, pero además con todo el ecosistema de emprendedores de la región. Obviamente, también desde la perspectiva turística. En relación a esto, y a través de la Subsecretaría de Turismo, contamos con la Estrategia Nacional de Turismo Sostenible al 2035, que es un compromiso del gobierno del Presidente Gabriel Boric. Este instrumento de planificación nos va a servir para mirar a largo plazo el desarrollo turístico y articularlo con la nueva Estrategia Regional de Desarrollo que se está actualizando junto a la Universidad de O’Higgins.
Un legado que queremos dejar, junto al Director de Sernatur, es la actualización de la Política de Turismo Regional. Parte de esa impronta también es la cercanía: estar siempre accesible. La invitación es a que quienes necesiten saber en qué estamos trabajando pasen por la oficina. Las puertas siempre están abiertas.”